Asume Santiago Peña prometiendo crear trabajo, con marcada agenda a favor del agronegocio y el capital
Peña saludando con el Palacio de López de fondo. Foto La Nación
Santiago Peña (44) asumió la presidencia prometiendo crear puestos de trabajo: «Necesitamos generar por lo menos 500 mil nuevos empleos de calidad para atender la demanda de la población y el crecimiento anual de nuevos ingresantes a la fuerza laboral. Desde el gobierno vamos a promover la creación de estos puestos de trabajo con el sector privado, lo que supone un gran esfuerzo de coordinación interinstitucional y territorial y de articulación con el sector productivo», prometió.
En un discurso más que optimista llegó a decir: “Y aquí quiero ser muy claro, el éxito es lograr que todos los paraguayos estén mejor y que el mundo sea testigo del resurgir de un gigante”, dijo.
Vale recordar que alrededor de un 25% de los 7 millones de paraguayos vive en pobreza.
En ningún párrafo de su discurso mencionó otros problemas estructurales del país como el reclamo de tierras de los campesinos, recordando siempre que el 3% de los propietarios tiene el 88% de las tierras. El país exhibe el peor índice GINI de tenencia de la tierra del mundo: 0,93. Cuando el 1 es desigualdad perfecta. El GINI europeo es de 0,57 y el de América Latina es de 0,79 para dar una idea.
Hizo algunas alusiones a la posibilidad de mejorar la salud y la educación públicas, aunque si bien en campaña anunció un plan para construir 20 mil viviendas al año, en el discurso de asunción olvidó este problema central del país: El déficit habitacional es el más grande de la región y el 90% de las viviendas de los más carenciados necesita diversos niveles de reparaciones según datos oficiales.
Escollos
La revisión del tratado de Itaipú, la mayor represa hidroeléctrica de América y la segunda más grande del mundo será tema principal de agenda.
Poder vender la energía excedente a precios de mercado es clave para el desarrollo paraguayo.
El Anexo C, dice que Brasil y Paraguay tienen derecho al 50 % de la energía generada por la represa, pero aquel que no use por completo su cuota deberá vender el excedente al socio a precios de costo. Paraguay buscará cambiar esa situación ya que la diferencia entre los precios de costo y de mercado le reportarían unos 3,5 mil millones de dólares anuales más a las exiguas arcas nacionales.
Sin embargo, desde sectores críticos al oficialismo se señala que existen riesgos de “nuevos negociados” en ese punto.
Peña sólo se detuvo a abrazar a Cartes en el Tedeum posterior a su asunción
Peña tuvo palabras de agradecimiento para el presidente del Partido Colorado, Horacio Cartes, su “padrino” político por “perseverar, sin desmayos, en la construcción de consensos y en la búsqueda de acuerdos por sobre las diferencias…Hoy nos toca llevar esa vocación política al servicio de todos los paraguayos. Deseamos ser un partido al servicio de la nación”, dijo.
El flamante presidente, de pasado en el Partido Liberal (PLRA) se afilió al Partido Colorado cuando era ministro de Hacienda de Cartes (ver Perfil).
Cartes que fue declarado “significativamente corrupto” por Estados Unidos durante la campaña electoral será actor fundamental durante el gobierno que inicia. De hecho los analistas entienden que Peña tendrá en el personalismo del ex presidente el escollo central de su gestión.
“¿Qué va a hacer cuando no pueda complacer los deseos de Cartes?”, es la pregunta del millón.
Otros elementos serios que no fueron mencionados en el discurso tienen que ver con las mafias del narcotráfico y el lavado de dinero que aprovechan la debilidad institucional del estado paraguayo para multiplicar sus tentáculos en el país con el consecuente legado de corrupción y violencia sicaria en las calles.
Significativo fue que la comitiva que los Estados Unidos envió a la asunción de Peña estuvo encabezada por la secretaria del Departamento de Interior, Debra Haaland; a la que acompañó el subsecretario de Asuntos Internacionales de Narcotráfico y Aplicación de la Ley del Departamento de Estado, Todd D. Robinson; el embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Frank O. Mora y la congresista por California, Norma Torres; todos asistidos por el embajador Marc Ostfield.
Mercosur
Peña pretende fortalecer el Mercosur del que pretende en erigirse en un centro logístico de distribución, tal como viene anunciando para «convertir a Paraguay en centro de la integración latinoamericana». En campaña el presidente dio a conocer su intención de construir un nuevo aeropuerto en el departamento de Presidente Hayes en el Chaco paraguayo.
Los problemas en la Hidrovía Paraná Paraguay, donde navieros y cámaras del agronegocio protestan por el peaje que cobra Argentina tuvo un párrafo en el discurso: «No puedo dejar de pensar que gestionar la hidrovía implica delicados procesos de equilibrio entre la integración y la soberanía de nuestros pueblos. No podemos estar satisfechos y debemos avanzar con coraje y mayor determinación», dijo Peña elevando la cabeza hacia Alberto Fernández; Gabriel Boric (Chile); Luis Arce Catacora (Bolivia); Luiz Inácio «Lula» da Silva (Brasil); y de Luis Lacalle Pou (Uruguay).
El observatorio de CDIA no encontró menciones a estos temas en el discurso de asunción
Unión Europea
A la toma de juramento asistió el rey de España, Felipe VI que inauguró embajada nueva en Asunción.
Santiago Peña asumió que el “cambio climático es real, es un gran desafío planetario y debemos tomar medidas rigurosas para evitar un mayor daño al planeta”, dijo aunque mencionó elípticamente algunas restricciones aprobadas por la Unión Europea a productos agrícolas realizados (carne, soja y maíz por mencionar los que afectan a Paraguay) en terrenos deforestados: “Aunque nuestro país no ha contribuido de forma importante a la generación de gases de efecto invernadero, vemos con preocupación que algunas iniciativas, sin duda bien intencionadas, podrían obstaculizar nuestro desarrollo humano”, indicó.
La norma europea amenaza retrasar el acuerdo comercial entre Mercosur y la la UE: “Paraguay es parte de la solución, por lo que priorizaremos un modelo de desarrollo justo, sostenible y sustentable en todos los aspectos, privilegiando nuestro medioambiente, que es nuestro hogar y que, con nuestra gente, es nuestro capital más valioso”, dijo Peña sin describir mucho cómo será dicha ecuación.
El episodio de la anulación de un convenio que se venía ejecutando con la UE para la “transformación educativa” no tuvo menciones.
“Lamentamos que, tras 30 años de cooperación de la Unión Europea en el Paraguay y 10 años de trabajo conjunto en el área educativa, la Cámara de Diputados haya votado en favor de la derogación de un apoyo incondicional y mutuamente acordado para la mejora de la calidad educativa en el país. Respetamos las decisiones soberanas del Paraguay. La UE nunca ha impuesto ni aspira a imponer un modelo educativo. La derogación unilateral de un Convenio de Financiación constituiría un incumplimiento de un compromiso internacional. Asimismo, repercutiría en las relaciones y afectaría a desembolsos acordados y a futuros proyectos de cooperación”, le recordó la oficina local de la UE al gobierno.
El senado, de mayoría colorada, tiene la palabra.
Taiwán y China
Asistió el vicepresidente de Taiwán, William Lai Ching-Te, favorito para las elecciones presidenciales del año próximo en la isla asiática. Se entiende que Peña continuará la relación con este país al que visitó en julio pasado recordando su pasado como becario en esas tierras.
Las cámaras del agronegocio y los maquiladores pretenden que se abran negociaciones con China continental, la principal economía del mundo, que dice que Taiwán es su provincia y le niega la independencia y lo pone como elemento cerrado en las mesas de negociación.
Por lo pronto, Paraguay seguirá fiel a Taiwán, aunque Peña no cerró la puerta a la posibilidad de iniciar conversaciones con el gigante rojo.
Guerra en Ucrania
Tuvo un par de párrafos para la guerra en Ucrania: “Paraguay no estará ausente de la lucha por la paz en todos los rincones del planeta, incluido en el conflicto entre Rusia y Ucrania. Mantenemos vínculos económicos, culturales e históricos con el pueblo de Rusia, pero no podemos permanecer indiferentes ante la agresión bélica que sufre el pueblo ucraniano, con consecuencias terribles para el desarrollo humano”, acusó.
Lo hizo comparando la situación de los ucranianos con la de nuestro país durante la Guerra contra la Triple Alianza (1864/70) cuando se enfrentó a Argentina, Brasil y Uruguay. “Fuimos invadidos por potencias más grandes y como consecuencia perdimos el 60% de nuestro territorio y al 90% de la población masculina. Ese conflicto ha dejado secuelas severas hasta hoy. A 153 años de concluida la guerra, seguimos nuestro proceso de recuperación”, recordó.
Ministros
Asumieron como ministros: del Interior, Enrique Riera, de Relaciones Exteriores (MRE), Rubén Ramírez, de Hacienda, Carlos Fernández, de Educación (MEC), Luis Ramírez, de Agricultura y Ganadería (MAG), Carlos Giménez, y de Obras Públicas (MOPC), Claudia Centurión.
También de: Defensa Nacional, Óscar González, de Salud (MSPyBS), María Teresa Barán, de Justicia, Ángel Barchini, de Industria y Comercio (MIC), Javier Giménez García de Zúñiga, de la Mujer, Cynthia Figueredo, y de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mtess), Mónica Recalde,
Completan la lista los ministros: del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), Rolando De Barros, de Desarrollo Social (MDS), Tadeo Rojas, de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH), Juan Carlos Baruja, de la Niñez y la Adolescencia (Minna), Walter Gutiérrez, y de Tecnologías de la Información y Comunicación (MITIC), Gustavo Villate.
Perfil
Aquí un perfil de la agencia de noticias argentina Temas Latinoamericanos (Telam): “Ganador de las internas de la Asociación Nacional Republicana (ANR, el nombre oficial del coloradismo), Santiago Peña, nacido en Asunción en 1978, fue padre de un varón a los 17 años, ya en pareja con Leticia Ocampo. Y apenas un año después tuvo una segunda hija.
Se licenció en Economía en la Universidad Católica capitalina a los 23 años y apenas dos años después terminó un máster en Administración Pública en la Universidad de Columbia, en Nueva York.
Para entonces ya había sido analista del Fondo de Desarrollo Industrial con solo 21 años y trabajado para el Banco Central paraguayo (BCP).
En 2009 fue requerido por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, para desempeñarse como economista responsable de países en África.
En 2012 fue elegido miembro del directorio del BCP por cinco años y en 2015, el entonces presidente Cartes lo convocó para que fuera el ministro de Hacienda.
Tenía apenas 37 años y, como el mandatario exigía que todos los funcionarios fueran afiliados al oficialismo, el economista debió dar el salto: hasta entonces estaba afiliado al opositor Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y renunció a la fuerza para firmar la ficha colorada.
Peña fue docente en la Universidad Católica y tiene publicados algunos trabajos de investigación en áreas de política monetaria y finanzas.
Ya había intentado en 2018 pelear la Presidencia del país, pero perdió entonces las internas partidarias ante Abdo Benítez. Por esos días algunos opositores lo consideraban un títere de Cartes.
De la cercanía no hay dudas: el nuevo mandatario era director, desde marzo de 2018, del banco Basa, propiedad del grupo Cartes.
Hincha de Olimpia, ahora despunta el vicio de los deportes en el gimnasio y en el paddle, pero supo jugar al rugby y hasta integró el seleccionado local, con el que disputó varios sudamericanos y dos mundiales.
En un país conservador y de fuerte tradición machista, Peña rompe con la línea general de la ANR: es favorable al matrimonio igualitario y hasta declaró que es preciso discutir el derecho al aborto sin prejuicios, aunque el Congreso discute por estos días un proyecto “en defensa de la familia” y contrario al “discurso de género”, lo que permite suponer que le será difícil avanzar en esas áreas”.
